Escrito por:
Mario Daniel Alfonso Caltenco Velazquez
Hombre y lenguaje. Lenguaje y hombre.
No es posible hablar de uno sin la presencia del otro. A través del lenguaje el
hombre logra capturar el pensamiento, la acción, sentimientos de seres actuales
como también de los de distintas épocas. Con él se comunica y puede hablar.
Históricamente el hombre fue capaz de hablar a partir de un momento de
iluminación (si así se le puede llamar) en que discriminó los sonidos y los
aplicó primero a determinados objetos de su entorno y posteriormente a ideas
cada ves más abstractas y subjetivas que brotaban de sentimientos y vivencias
que formaban parte del bagaje de experiencias que le ocurrían y de las cuales
era sujeto y objeto. Esto ocurrió dentro de un contexto social en el
que el hombre interactuaba ya que como ente social no puede vivir
aislado.
Son
en la actualidad alrededor de unas seis mil quinientas las lenguas que se hablan en nuestro
mundo. De ellas, solamente veinticinco pueden considerarse importantes por su
extensión y por su producción escrita.
La
pregunta que ha preocupado siempre a pensadores y lingüistas es inmediata: ¿De
dónde surgió tal diversidad? ¿Cuál fue el origen de todas las lenguas?
El
Lenguaje: medio de comunicación entre los seres humanos a través de signos
orales y escritos que poseen un significado. En un sentido más amplio, es
cualquier procedimiento que sirve para comunicarse.
Una
de las mayores interrogantes que se plantean los que estudian temas comunes a
la lingüística es el origen del lenguaje humano. Hasta la fecha se han sucedido
distintas hipótesis que tratan de arrojar algo de luz a esta pregunta pero, por
desgracia, la respuesta definitiva aún no ha sido hallada... En esta parte del
trabajo nos referiremos a las Teorías o Hipótesis que existen del origen del
Lenguaje de forma breve, para hacernos una idea más global del tema.
Se
ha supuesto, que los hombres empezaron por imitar los sonidos que oían en los animales,
o a lanzar gritos emocionales instintivos o cantos de sincronización al
trabajar en equipo, más o menos como los remeros del Volga, y todo esto
dio origen al lenguaje.
Engels,
en su "Dialéctica de la naturaleza" dice: "... los hombres en
formación llegaron a un punto en que tuvieron necesidad de decirse algo los
unos a los otros. La necesidad creó el órgano. La laringe poco desarrollada del
mono se fue transformando... mientras los órganos de la boca aprendían a
pronunciar un sonido tras otro."
Y
esto es, en definitiva, lo que se acepta hoy. “Mayoritariamente” se cree, se
escribe y se enseña que de los gruñidos han surgido las modernas gramáticas; de
lo simple lo complejo y de lo primitivo lo civilizado.
Asimismo,
existe el pensamiento de que hubo primera una única lengua y que todas las
demás son sus derivados. Esta teoría la propuso el filósofo alemán Gottfried
Wilhelm Leibniz en el siglo XVIII, y se conoce como “monogénesis”. Mientras
tanto, “poligénesis” es el nombre que recibe la teoría contraria a la de
Leibniz. Tampoco hay respuesta aún a esta pregunta.
En
primer lugar, notemos que los lenguajes escritos más antiguos que nos han
llegado suelen ser los más difíciles y complicados. Es de todos conocido que el
griego clásico es más difícil que el griego moderno; el latín mas que el
castellano, el francés o el inglés, y el chino antiguo mucho más que el chino
moderno. Incluso, si comparamos. los más antiguos entre sí, resulta que el
griego clásico, anterior 600 años al latín, era más complicado que éste, y si
nos remontamos al Sánscrito Veda (1.500 a.C.) la dificultad es increíblemente
superior, ya que, por ejemplo, cada verbo poseía 500 partes (compárese con el
ingles, en él que cada verbo solo posee 5 partes). ¿Qué nos viene a decir este
hecho?
Pensemos
un momento... si la teoría de la evolución fuera verdad en todo ambitos, deberíamos esperar que
las lenguas antiguas fuesen mas simples que las modernas, ya que -según la
teoría- de los simple se evoluciona a lo complejo. Pero esto no es lo que
podemos observar, sino más bien todo lo contrario.
Si
estudiamos detenidamente las lenguas modernas podemos observar una creciente
degeneración de las lenguas primitivas, una simplificación a partir de un
idioma complicado.
Por
todo esto definir un concepto tan antiguo
como lo qué es un mito (del griego, muthos) no es, desde luego, tarea
fácil. Una definición entregada por la Real Academia de la Lengua, señala que
el mito es una “narración maravillosa situada fuera del tiempo histórico y
protagonizada por personajes de carácter divino o heroico. Con frecuencia
interpreta el origen del mundo o grandes acontecimientos de la humanidad.” Y
agrega que es una “Historia ficticia o personaje literario o artístico que
condensa alguna realidad humana de significación universal”.
A
partir de esta definición, podemos agregar que los mitos son relatos que
cuentan cómo se crearon los cielos, de dónde provienen los vientos o cómo nacen
los propios dioses; los mitos nos transportan a un tiempo sagrado distinto al
nuestro, más abierto a los hombres como su propio horizonte.
La
relación entre los mitos y los diversos tipos de literatura, sea ésta oral o
escrita, al igual que los propios mitos, que podemos encontrarlos tanto por
escrito, como por vía de la tradición oral, es sumamente detallada, a juzgar
por la gran variedad de autores que han tratado abundantemente la cuestión
(hasta el punto de que, en el plano de los estudios mitológicos, las relaciones
entre cuentos y mitos han llegado a constituir una suerte de tópico ineludible,
que hace hincapié en la importancia fundamental de esa distinción para poder
arribar a una comprensión plena del carácter propio de los mitos.
La
neta demarcación que establece el estudio
Bronisław Kasper Malinowski (quien fue el refundador de la antropología social británica a partir de
su renovación metodológica basada en la experiencia personal del trabajo de
campo y en la consideración
funcional de la cultura). Nos permite comprender con mayor facilidad
el resto de las clasificaciones que
ofrecen otros autores, así como los posicionamientos que adoptan unos y otros
respecto del tema a tratar, esto es, las diferencias y afinidades entre los
mitos y otros tipos de relatos.
Tal
como se desprende del trabajo de campo de nuestro presente autor, los
trobriandeses distinguen entre al menos tres tipos de narraciones: los
cuentos, las leyendas, sagas y narraciones históricas y los mitos.
La primera clasificación comprende aquellos relatos ficcionales cuya principal
finalidad es meramente recreativa, estas son narraciones consideradas
fantasiosas, destinadas al solaz y esparcimiento de los oyentes. En términos
del propio Malinowski, este tipo de relatos, son asimilables a lo que en
nuestra cultura calificamos usualmente como "cuentos populares" o
"cuentos maravillosos"
En
un sentido mas coloquial se dice que las leyendas son cuentos o historias que
se inventaban en un intento de dar explicación a aquellos fenómenos que no
comprendían, o también historias que contaban para entretener y divertirse, o
incluso meter miedo a los niños pequeños!
Sin
embargo, no todos los mitos tienen por qué tener este propósito explicativo.
Igualmente, la mayoría de los mitos están relacionados con una fuerza natural o
una deidad,
pero muchos son simplemente historias y leyendas que se han ido transmitiendo
oralmente de generación en generación.
¿Pero?
¿Por qué interesarnos hoy en la mitología? Más allá de lo literario, lo
estético o incluso, su aspecto lúdico, la mitología es una herramienta
simbólica, una alegoría universal sin fecha de vencimiento.
A
su vez la poesía épica narra las hazañas de héroes. Los protagonistas de los
relatos épicos personifican ideales guerreros y su destino se presenta ligado
al de su pueblo.
Ya Aristóteles
señalaba en su Poética que la imitación podía
hacerse de tres maneras: pintando a los personajes mejores de lo que son en la
realidad, pintándolos como son en la realidad o haciéndolos aparecer como
peores de lo que son. Al tomar como referencia
a los seres humanos para indicar las cualidades de los personajes, Aristóteles
estaba ofreciendo un modelo de conducta para los espectadores o lectores. Ante
los mejores es necesario admirarse, ante los iguales reconocerse y ante los
peores precaverse.
En
principio la épica se transmitía oralmente y cumplía una doble función social;
por una parte informaba a un público que no sabía leer sobre sucesos gloriosos
de su historia; por otra parte, proponía un modelo de héroe a la colectividad,
un héroe que encarnaba las virtudes guerreras y caballerescas.
En sus orígenes, la épica se relaciona con las narraciones de mitos o relatos
cosmogónicos que explican el nacimiento del mundo. Un subgénero de la épica es
la epopeya, aquellos relatos en los que los dioses adquieren gran protagonismo,
es el caso, p.e. de los relato griegos de Homero. En la Edad Media, la épica
alcanzó u gran desarrollo con los Cantares de gesta (el castellano Cantar de
Mío Cid , el alemán Cantar de los Nibelungos, y la francesa Canción de Roldán)
y las narraciones caballerescas sobre el rey Arturo y los caballeros de la
Tabla Redonda.
En la épica los protagonistas son seres humanos, que son héroes por sus
hazañas, pero no son dioses. Sus hazañas son importantes para el destino de su
pueblo y se relacionan con hechos que pueden ser históricos o legendarios, pero
que son considerados verídicos por la colectividad a quien va destinada.
Por
ejemplo: Entre el quinto y el tercer milenio a.C. la Península Balcánica estuvo
dominada por pueblos marítimos procedentes de Asia. En el segundo milenio a.C.,
los aqueos, un pueblo guerrero de origen indoeuropeo, comenzaron a extenderse
en la península, al igual que los dorios y el resto de pueblos, atraídos por
sus condiciones topográficas.
Todos
estos pueblos antecesores, dejarán influencias muy beneficiosas para el
desarrollo del mundo griego, por tanto, se puede decir que de la mezcla de de
poblaciones de épocas y orígenes diferentes había llegado a formarse el pueblo
griego.
Durante
el primer milenio antes de nuestra era, los habitantes de Grecia no formaban un
único estado, aunque mantenían un sentimiento de unión y fraternidad entre
ellos, considerándose a sí mismos un solo pueblo. Las consecuencias de este
sentimiento fueron, por ejemplo, el habla de una única lengua, el griego,
aunque presentando numerosos dialectos; también compartían las mismas creencias
y adoraban a los mismos dioses.
Zeus
era el dios principal y tenía autoridad sobre el resto de dioses y diosas. Los
más importantes dioses residían en el Monte Olimpo, tenían especto humano y,
aunque eran inmortales, tenían cualidades y debilidades humanas.
Además
pensaban que los dioses podían tener relación con los humanos, e incluso
descendencia, que son los semidioses y los héroes a quienes también adoraban.
Los
griegos también creían en criaturas fantásticas como los centauros (unos
caballos con cabeza, brazos y busto humanos), cíclopes (monstruos de un solo
ojo), arpías, esfinges,…. que a menudo aparecían en sus relatos.
Estos
dioses, héroes y criaturas legendarias son los responsables de que la cultura
griega tuviera una infinidad de mitos, que son historias también fantásticas,
habitualmente de tema religioso. El conjunto de ellos es la mitología que
intentaban explicar el origen del mundo, de las divinidades y de los héroes más
famosos.
La
mitología griega es una de las más ricas que jamás se hayan producido como lo
demuestran sus monumentos y demás manifestaciones artísticas, así como, una
tradición literaria que tendrá muchas influencias de Homero que recogió muchos
de los mitos griegos en sus libros.
Si
bien la taxonomía de Van Gennep añade una categoría más a la división
trobriandesa reseñada por Malinowski (a
saber, la fábula, la cual está de alguna manera emparentada con el cuento),
esta aportación resulta significativa, en tanto que nos posibilita hacer
referencia a una cuestión que Lévi-Strauss considera central y representativa
de la "lógica de lo concreto" que él atribuye al denominado
"pensamiento salvaje": la animalización de lo humano y la
hominización de lo animal (antropomorfismo de la naturaleza y fisiomorfismo del
hombre).
En la fábula, encontramos tres elementos que le son peculiares: la
producción en verso, la hominización de los animales y la presencia
de una moraleja final. Debemos tener en cuenta que la alusión de
propiedades animales atribuidas a los seres humanos y viceversa (propiedades
humanas atribuidas a los animales), constituye una suerte de constante en el
imaginario griego antiguo que posibilita tanto la representación de vicios y
virtudes humanas (que son simbolizadas en los animales y aceptadas de común
acuerdo por os oyentes), como la difusión de moralejas y normas morales más o
menos explícitas.
Si
revisamos las cuatro funciones
tradicionales de la mitología, encontraremos que en gran parte se
han desvanecido. Esta es, al menos, la mirada que propone Joseph Campbell, en
su Mitología Creativa.
La
función religiosa es, sin duda, la primera de las funciones de una mitología
viva. Lo cual significa, en términos prácticos, que tenga la capacidad
implícita de generar temor (en el sentido del respeto) y humildad.
Pero
lo cierto es que debido a esta nueva magia conocida como ciencia la teología, en términos actuales, no puede aspirar a ser más que uno
simple ejercicio literario. Los textos arcaicos, en rigor, solo pueden
comprenderse a la luz del contexto histórico que les daba sentido, un universo
en el cual sus héroes, hazañas y sentencias resultaban infalibles.
Ya
no buscamos la imagen del universo en los Textos Sagrados arcaicos, puesto que
es la ciencia la que nos provee este tipo de respuestas. ¿Cómo ha llegado la
ciencia a sustituir paulatinamente el pensamiento mítico que ha dominado la
mente de la humanidad por siglos y siglos? Un breve recorrido por la historia de la ciencia,
nos llevará a repasar una serie de revoluciones relevantes que fueron separando
a lo mitológico de su función creadora de cosmogonías.
Por
eso, mientras que en la Edad Media, las Sagradas Escrituras eran las depositarias de toda
fe, la misma fe, tomó a la Razón como destino durante la Ilustración. ¿Esa fe incondicional está depositada hoy en día en la
ciencia? Probablemente, la confianza en que la ciencia puede protegernos ante
la inmensidad de todo lo que aún no sabemos, es la característica más notable
de nuestro tiempo. La ciencia, reemplaza al mito en su función metafísica y
mística, presentándose como objeto de culto y como placebo frente a lo
misterioso.
“El
paraíso, está aislado del mundo habitable por montañas o mares, o por alguna
región tórrida, que no se puede cruzar. Por eso, quienes han escrito sobre
topografía, no lo mencionan” Santo Tomás de Aquino
Hacia
800 a.C.
Beda el venerable había sugerido que el Paraíso podría no ser un lugar físico
sino un sitio espiritual. Esta idea, sin embargo, fue rechazada primero
por San Agustin,
y más tarde por SantoTomás quién
hacia el 1300 habría intentado argumentar razonablemente respecto a la
existencia física del Paraíso el cual no solo existiría sino que alguna vez
habría de ser descubierto.
Y
así, de acuerdo a la cosmovisión dominante durante la Edad Media, Dantehabía colocado el Paraíso en la cima del Purgatorio. No se
trataba pues, de una metáfora, sino de una elaboración mítica que describían el
modo en que los hombres medievales entendían físicamente el mundo en el que
vivían. En efecto, cuando Colón durante su tercer viaje, pasó entre la isla
Trinidad y tierra firme de Sudamérica, el volumen de agua del Orinoco que
desembocaba en el Atlántico, creyó sin vacilaciones que se trataba de uno de
los ríos del Paraíso.
Toda superstición es sin lugar a dudas, un concepto relativo porque desde
su misma etimología, sugiere creer en algo que pertenece a una visión del
pasado. La tierra plana y el sol girando sobre ella es una visión del pasado.
No era un superstición en el siglo 8 a.C, sino una explicación que
se correspondía con el alcance de la observación empírica por entonces. Y el
valor espiritual de esta visión residía en que le otrogaba al hombre la
seguridad respecto a la existencia de un sentido al universo: la armonía.
En
la actualidad, la mirada del universo ya no nos sugiere armonía, sino por el
contario conflicto, cambio e inestabilidad. Y no se trata sólo de pensar
respecto a la información conocida actualmente por la ciencia, sino también
el paradigma ubica al hombre en una relación de inestabilidad
respecto al mismo saber científico e incluso, respecto al modo en que la
civilización se relaciona con los descubrimientos científicos.
La
tercera función de la mitología es la de legitimar y mantener el orden
establecido. Pero lo que sucede, en consecuencia, es que el individuo ahora, se
encuentra solo. Como diría Nietzche, o todo es falso, o todo está permitido.
Y
la última función, la de centrar y armonizar al individuo que generaba de por
sí, una entrega absoluta, ya no es posible, porque la mitología a perdido su
presencia contenedora en el individuo.
Pero
puesto que la simbolización es lo que estructura el significado que el hombre hace para poderle encontrar sentido
a las cosas al momento de construirles un sentido al nombrarlas. No se nos es difícil
pensar que el origen sobre el cual el ser humano ah sustentado todo aquello que
cree como su propia realidad es a través de la simbolización culturalmente
aceptada de los conceptos que constituyen su realidad social. Ahora usamos palabras para referirnos a las
cosas por lo tanto el lenguaje es una de las máximas creaciones del hombre,
pues a partir de el puede representar su entorno, sus ideas, sus pensamientos,
etc.
Una
lengua es algo vivo como la comunidad que la utiliza y varía desarrollando cambios
a través del tiempo y espacio, y por esto poetas, filósofos, sociólogos, etc. y
en especial la lingüística que estudia el lenguaje en sus dos ramas
principales: el habla y la escritura, han buscado en todo el largo camino que
ha seguido el lenguaje desde su creación.
La
cohesión de un grupo se da através de los elementos ideológicos
que permite a un grupo realmente unirse, esta puede ser una idea que le otorgue
un sentido de pertenencia a un individuo dentro del grupo, por su parte la
cultura es el conjunto de valores, creencias y entendimientos importantes que
los integrantes de una sociedad tienen en común. La cultura ofrece formas
definidas de pensamiento, sentimiento y reacción que guían la toma de
decisiones y otras actividades de los participantes en la agrupación.
Las
agrupaciones de éxito? al parecer tienen fuertes
culturas que atraen, retienen y recompensan a la gente por desempeñar roles y
cumplen metas socialmente aceptadas ante su juicio moral.
Esto
quiere decir que esas relaciones y metas
son consensuales, percibidas como justas entre los miembros del grupo y
los que son gobernados. Demandan el buen desempeño de las autoridades y que
esas sean respetadas como una acción
percibida como de interés común.
La
cultura a través del tiempo ha sido una mezcla de rasgos y distintivos
espirituales y afectivos, que caracterizan a una sociedad o grupo social en un
período determinado. Engloba además modos de vida, ceremonias, arte,
invenciones, tecnología, sistemas de valores, derechos fundamentales del ser
humano, tradiciones y creencias
La
cultura es algo que nadie discute y los mitos y las leyendas son tal vez los
mejores ejemplos de cómo el ser humano ah utilizado el lenguaje para
representar su entorno, sus ideas, sus pensamientos, etc y asi poder darle un
significado a estos mismos y a su vez cohesionarse en sociedad.
Si
el mito realmente se propaga de forma oral como se ah mencionado con anterioridad, podemos
concluir que las ideas se construyen dándoles un significado simbólico el cual
se propaga através de la conversación, lo que le daba un significado general
para todos cuando este significado era aceptado por todos lo que lo volvía algo
común y por tal motivo en algo de su
cultura.
Así
pues para formar a un grupo se necesita que este posea una Historia un tiempo compartido
que les otorgue una identidad, normas y leyes, lo que desembocara en el sentido
de pertenencia del mismo grupo. Y aunque actualmente se considera que los
pueblos que se han alejado de esta forma de ver el mundo como pueblos mas civilizados
con mayor progreso y por ende mas racionales es asumir que el progreso y la civilización como conceptos culturalmente aceptados en
nuestra forma de pensamiento.
Y
a pesar de todo para que un grupo forme una civilización institucionalmente
establecida debe estar formado por personas que culturalmente aceptan la forma de gobierno sus normas establecidas.
La
actividad mental es exclusivamente humana y es el resultado de la
interiorización de signos, de la cultura, de los procesos sociales. La cultura
se internaliza en forma de un sistema neuropsíquico sobre la base fisiológica
del cerebro humano. La actividad
nerviosa superior ha internalizado significados sociales, acumulados en el
patrimonio cultural de la humanidad, mediatizados por signos. Este proceso se
realiza en el transcurso del desarrollo ONTOGENÉTICO en sociedad, a partir de
la actividad social del niño con los adultos, que son los transmisores de la
experiencia social
El
entendimiento de la cultura, para entender el dilema de individuo y sociedad
es fundamental y en la medida que este
punto se desvanece al momento de centrar el objeto de estudio en el individuo y
su racionalidad de forma cada vez mas aislada se va disminuyendo la capacidad
de explicación. Por lo tanto es fácil suponer que todo aquello que se
internaliza de manera simbólica en la cultura personal adquiere un valor y o
significado que le permite estructurar su pensamiento y por ende su conducta
de quien lo adquiere
Y es en el héroe donde
se encarnan las virtudes a las que los hombres aspiramos en cada momento de la
historia. Entender la vinculación entre
los valores heroicos y los valores sociales es básico para comprender la transformación
que se produce al llegar a la época contemporánea. Señalemos un punto de
partida: para que aparezca el héroe la sociedad ha de tener un grado de
cohesión suficiente como para que existan unos valores reconocidos y comunes.
Sin valores no hay héroe; sin valores compartidos, precisando más, no puede
existir un personaje que permita la ejemplificación heroica. El héroe es
siempre una propuesta, una encarnación de ideales.
Por
lo tanto la cultura no se destruye y solo se transforma y se modernizan prueba de ello es como normalmente mucha gente
hoy en día relaciona a la mitología con
culturas antiguas o religiones; no siempre es así.
Por
ejemplo, series de televisión, libros e historietas,
y juegos de rol entre otros, que logran
formar un universo ficticio propio; adquieren componentes mitológicos muy
importantes que incluso a veces pueden llegar a dar lugar a profundos y
complicados sistemas filosóficos.
Algunos
críticos opinan que por el hecho de que los personajes principales y los ciclos
de historias de las narraciones modernas no sean de dominio
público, las leyes sobre derechos de
autor impiden a los autores independientes continuar ciclos de
historias modernas, evitando que dichas sagas de personajes compartan algunas
de las características esenciales de las mitologías; por lo menos, hasta que se
cumpla el plazo de derechos de autor y pasen a ser de dominio público. A pesar
de eso, los propietarios de los derechos de autor en ocasiones continúan las
historias con otros autores, como es el caso de personajes como Tarzán y
las novelas de Conan de L. Sprague de Camp, o los cómics de superhéroes,
la mayoría de los cuales han tenido docenas de autores.
Al
final de cuentas todo aquello que no es irreal pero que en su momento fue
considerado como algo real tiene un rasgo de existencia de alguna manera. Ya
que los simbolismos son los que estructuran los significados y el proceso de
interacción entre individuo-sociedad, no
esta dentro del individuo o en las
instituciones, las sociedades se construyen en la medida que van haciendo las cosas, es decir en la medida que sus miembros van
adquiriendo una historia y un tiempo compartido del cual creen normas, leyes y una identidad que les otorgue un sentido de pertenecía que
le permita comprender su entorno.
Porque amenos que comprendamos al imaginario que compone a la sociedad
en términos culturales no se podrá comprender su estructura social ya que en la
manera que nos plateamos las cosas es la forma en la que definimos las mismas
ya que el grupo genera una ritualidad que le da un sentido de pertenencia y se
instituye dentro del mismo, tanto en su forma de pensar como en su
normatividad.
Todo
esto es algo objetivo y a la vez subjetivo que todos llegan a comprender y a su
vez se llega a considerar como algo propio y único de cada uno de los miembros
del extracto social. Para entender la acción social hay que entender las reglas
y estructuras que posee esa sociedad y comenzar por su cultura y los
simbolismos en la que esta se ah estructurado nos puede abrir las puertas para
comprender el pensamiento de los individuos que la conforman. Y tanto sus mitos
y leyendas como sus héroes pueden ser un
excelente punto de partida para ello.
Bibliografía:
Malinowski, Bronislaw: El
Cultivo de la tierra y los ritos agrícolas en las islas Trobriand. Editorial
Labor. (1977)
Arnold Van Gennep: La
formación de las leyendas (1982)
Claude Lévi-Strauss Antropología
estructural: Mito, sociedad, humanidades. México: Ediciones Siglo XXI. (2006)
Manuel Garin Boronat: Mitojuegos. Ensayo Sobre el héroe y el mito en el
imaginario Nintendo – Barcelona (2009)
Jose B.Bergua: Mitología Universal -Madrid
(1979)
Martin
Sagrera: Mitos y sociedad -Barcelona (1967)
Joseph Campbell: El Héroe de las Mil
Caras -Estados Unidos 1949
Y bueno espero les halla gustado este ensayo que escribí ya hace tiempo para una de mis clases de la universidad en lo personal creo que ah sido de mis mejores trabajos y creo que no eh vuelto a escribir algo así de bueno académica mente hablando en una larga temporada, se que esa habilidad ahí esta pero no me ah llegado la inspiración.
Decidí poner este ensayo aquí ya que esta es la razón de este blog hablar de temas un tanto mas intelectuales pero de forma amigable e interesante aveces hasta cómica que logren interesar a las personas en ver mas halla de lo evidente.